Un día 24 de octubre del 2003, volaba por última vez un avión Concorde de la aerolínea British Airways, el último vuelo fue el BA002 desde Nueva York a Londres. La aeronave correspondió al G-BOAG al mando del Capitán Mike Bannister y fue el último vuelo comercial del Concorde aterrizando en el London Heathrow. Al momento del retiro British Airways operaba una flota de siete aviones Concorde.
Los inicios
Con British Airways el Concorde realizó alrededor de 50.000 vuelos y transportó nada menos que 2.5 millones de pasajeros a velocidad supersónica. El primer vuelo comercial con la compañía se realizó el día 21 de enero de 1976 y correspondió al vuelo BA300 desde Londres a Bahrain vuelo que estuvo al mando del Capitán Norman Todd, con el avión matrícula G-BOAA. El inicio de las operaciones aéreas de estas aeronaves se realizó simultáneamente con el vuelo del Concorde de Air France a Río de Janeiro.
Vuelos destacados
En noviembre de 1986 un Concorde de British Airways realizó un vuelo alrededor del mundo cubriendo 28.238 millas de distancia en 29 hrs 59 minutos. El vuelo transatlántico más rápido que realizó entre Nueva York y Londres fue el 7 de febrero de 1996 y tuvo una duración de 2 hrs 52 minutos 59 segundos con el avión matrícula G-BOAD.
Para el correcto mantenimiento un equipo de 250 ingenieros y técnicos de British Airways trabajaban junto a las autoridades para asegurar la operación segura de la aeronave.
Diseñado para la velocidad
El Concorde fue propulsado por los motores más potentes disponibles en los años de su desarrollo los Rolls Royce/Snecma Olympus 593 con postcombustión, convirtiéndolo en el avión jet comercial con los motores más potentes. La aeronave operaba en un rango de velocidad que iba desde los 220 nudos (407 Km/h) para el despegue hasta una velocidad de crucero de 1.175 nudos (2.173 Km/h) es decir ¡dos veces la velocidad del sonido!