La compañía de EE.UU. en un comunicado referente a los resultados financieros del segundo trimestre del 2016, si bien no precisó en que se cerraría la línea de producción del Boeing 747 indicó que teniendo en cuenta el debilitamiento del mercado de carga aérea actual con respecto a lo previsto por la compañía. En este contexto Boeing seguirá produciendo aviones 747-8 a un ritmo de 0,5 por mes, y por ahora se proyecta que no aumentará la tasa de producción a 1,0 por mes en 2019.
Desde que entró en servicio el Boeing 747 hasta la fecha se han construido más de 1.500 aviones de este tipo.
«Se trata en definitiva, de las decisiones proactivas para fortalecer nuestro negocio en el futuro», dijo el Presidente y CEO de Boeing Dennis Muilenburg. «Nuestra inversión en aviones de prueba 787 facilitó el camino para la creciente flota Dreamliner hoy y ayudó a refinar las mejoras para otras plataformas. En el programa 747, continuamos monitoreando el mercado de carga aérea y así agresivamente impulsar la productividad y reducción de costos a medida que trabajamos para ganar pedidos adicionales para apoyar la producción en curso «.
Es un hecho que la demanda por 747 cargueros y de pasajeros ha bajado, y además en el mecado los pedidos de cargueros han experimentado una fuerte desaceleración desde la crisis financiera mundial de 2008. Hoy en día gran cantidad de carga viaja por mar o en las bodegas de los aviones de pasajeros. Lo anterior sunmado a que en la versión de pasajeros, actualmente el 747 se ha visto afectado por las nuevas tendencias de las compañías aéreas que recurren a jets bimotores más pequeños y económicos de operar.
La presencia del Boeing 747-8F en Farnborough fue parte de las medidas «agresivas» para impulsar este modelo en el mercado. Este diseño de avión carguero basado en la prestigiosa familia 747, tuvo un importante anuncio durante Farnborough al confirmarse el pedido de 20 aviones más para la empresa de transporte Volga Dnper para ser recibidos en los próximos 6 años.
