Un 27 de enero de 1930 llegaba a Magallanes el Junkers R-42 trimotor, al mando del entonces Comandante Arturo Merino Benítez, abriendo la ruta aérea hasta Magallanes.
Este importante hito en la conectividad aérea nacional se motivó al realizarse de manera efectiva la creación de la ruta aeropostal Santiago-Arica, con el apoyo de el entonces Presidente de la República Gral. Carlos Ibáñez. Así el Comandante Merino, se propuso el replicar lo mismo hacia el extremo sur de nuestro país.
El proyecto contemplaba dos etapas, en primera instancia lograr una ruta entre Santiago y Puerto Montt. Esta primera etapa se fue conformando con diversos vuelos entre Santiago y Puerto Montt en aviones Junkers con escalas en Maquehue (Temuco). También el establecimiento de la Escuadrilla de Anfibios N° 1 desde La Chamiza en Puerto Montt permitió realizar diversos vuelos de exploración en las complejas áreas de los canales al sur de esa ciudad. Luego de explorar los canales australes se lograron definir zonas para reabastecer a las aeronaves de combustible para luego llegar a Magallanes.
Lograr esta operación implicó un enorme esfuerzo logístico para poder obtener con los precarios medios de la época la información meteorológica, además del apoyo de unidades navales de la Armada de Chile, para eventuales accidentes o emergencias.
El vuelo a Magallanes
Para lograr unir por aire Puerto Montt con Punta Arenas, se dispuso modificar uno de los bombarderos Junkers R-42 agregándoles flotadores, la aeronaves seleccionada fue el avión N°6.
La tripulación del Junkers R-42 N°6 estuvo compuesta por: Comandante Arturo Merino B, Capitán Alfredo Fuentes M, Técnico Mecánico Fritz Reiche, Radiooperador Sargento 1° Luis Soto, fotógrafo Sargento 2° Alfredo Moreno, y el Cabo Mecánico Uldaricio Espinoza.
El vuelo se planificó con escalas en: Aysén, Puerto Natales y Magallanes. El 26 de enero salieron de Puerto Montt en el trimotor con rumbo a Magallanes, sin embargo como es habitual en esa zona el clima comenzó a ser muy complicado con escasa visibilidad y vientos huracanados. Con el fin de evitar una tragedia se vieron forzados a aterrizar en el sector denominado Ancón sin Salida, que era una zona “abrigada”, cabe recordar que el R-42 es un avión cuya cabina es descubierta.
Así esperaron hasta las 20:00 hrs y continuaron el viaje volando directamente a Puerto Natales arribando a esa ciudad a las 21:00 hrs.
El día 27 de enero, siendo las 08:40 hrs emprendieron el vuelo desde Puerto Natalaes hacia Magallanes. En tanto en la ciudad de Punta Arenas llegó la noticia de que venía un avión desde Natales y la zona costera de la ciudad se llenó de gente.
En tanto también llegaron autoridades de la zona, como el Intendente, Jefe del Apostadero, Comandante de la Guarnición, Gobernador Marítimo, el Alcalde, etc. En el muelle se colocó la banda para dar la bienvenida a los héroes que llegarían por vía aérea.
Pocos minutos pasadas las 10 de la mañana fue avistado el avión Junkers, el avión pasó recorriendo la ciudad por la costa para luego realizar un viraje para luego amarizar.
La tripulación fue recibida por una lancha de la gobernación y luego conducidos el Comandante Merino y el Capitán Fuentes, al muelle donde fueron recibidos con ovaciones y vítores.
Conducidos a la Intendencia el Comandante Merino Benítez y el Capitán Fuentes, fueron ovacionados por la multitud que se agolpaba fuera para vitorearlos y demostrarles su admiración y felicidad. En dicho lugar el Comandante Merino, en emocionadas palabras indicó: “Estamos trabajando por unir de un extremo a otro del país el territorio con rutas aéreas. Con ello nuestra Aviación Militar coopera de forma económica a los gastos que demanda su sostenimiento y la importancia de sus servicios.”
La tripulación fue testigo de numerosas muestras de cariño y admiración de parte de los compatriotas de la austral ciudad, que se extendieron por varios días.
La fatalidad
Se recibió la orden de aprovechar el avión Junkers para realizar un vuelo de exploración para unos terrenos devueltos al Estado de Chile, por parte de la Sociedad Explotadora de Tierra del Fuego. En este vuelo se sumó a la tripulación, el Intendente de la Provincia Manuel Chaparro R.
El avión despegó a las 16:00 hrs del día 7 de febrero, en momentos en que el avión Junkers R-42 volaba sobre Isla Dawson a unos 1.300 metros de altura falló el motor central del avión, sin embargo los dos motores restantes no tenían suficiente potencia para mantener el avión en vuelo. En esas condiciones se decide volver y buscar una zona para amarizar, al problema técnico, se sumó las malas condiciones atmosféricas que comenzaron a enfrentar con fuertes vientos en contra de la dirección de vuelo. Así el avión amarizó sobre mar muy agitado lo que hizo que se rompiera un montante de uno de los flotadores quedando uno de los flotadores tocando el agua. Estaban aproximadamente a una milla de la costa frente a la Estancia Aguas Frescas.
Transcurrieron seis horas desde el incidente y a las llamadas de auxilio desde el avión vía radiotelégrafo. El avión a las 22:30 hrs se terminó de hundir el avión. La tripulación como pudo se aferró de los restos de flotadores que quedaban siendo algunos de ellos arrojados violentamente por una ola. En su ayuda llegó el buque remolcador “Antonio Díaz” rescatando a los maltrechos tripulantes, más lamentado el fallecimiento del Capitán Fuentes de quién después se recuperó su cuerpo, sin embargo del Sargento 1° Luis Soto y el Sargento 2° Alfredo Moreno no se volvieron a encontrar sus restos.
Sin duda alguna, el sacrificio de lograr conectar eficientemente por la vía aérea a nuestro país es algo que visionariamente buscó el entonces Comandante Arturo Merino Benítez y que hoy en día a 90 años de distancia gozamos en plenitud los chilenos.
Historia Fuerza Aérea de Chile Tomo 1, Comandancia en Jefe (1999).
Revista FACH N°152, Enero – Febrero 1980.
Historia de la Fuerza Aérea de Chile Tomo 1, Rodolfo Martínez Ugarte (Edición 1963).
