Bastaron solo 6 minutos de prueba para que la aeronave superara en más de cinco veces a la velocidad del sonido, volando a 6.100 kilómetros por hora, lo que supone un récord absoluto.
«Esta prueba demuestra que la tecnología ha madurado hasta el punto de que se abre la puerta a aplicaciones prácticas», aseguró por su parte Darryl Davis, el presidente de Boeing Phantom Works, la compañía que diseñó el WaveRider, añadiendo que fue «un logro histórico” que ha estado preparándose durante años.
La aeronave no tripulada, desarrollada por la NASA y la Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados de Defensa de Estados Unidos (DARPA, según sus siglas en inglés), fue lanzada desde un bombardero B-52 al que iba anclada.
«Fue un éxito completo la misión», afirmó el director del programa Charlie Brink. Cabe mencionar que el Pentágono espera usar la aeronave con fines militares.
Fuente: US AirForce