El día 10 de julio de 1940, se iniciaba la que sería conocida como la “Batalla de Inglaterra”, que se desarrollaría por sobre los cielos del Canal de la Mancha y de Inglaterra, enfrentando a la Royal Air Force (RAF) contra la Luftwaffe Alemana.
Con el retiro de las tropas aliadas el 18 de junio de 1940, ambas fuerzas aéreas, habían tenido grandes pérdidas tanto en aviones como en personal. Por cuanto en esas semanas se dieron un respiro en el cual la Luftwaffe reemplazó los aviones perdidos y tomó posesión de los aeródromos de los territorios capturados. Por contraparte en la RAF, se procuraba tener la mayor cantidad de aviones y pilotos entrenados disponibles, para enfrentar lo que ya a todas luces era una realidad, el ataque de las fuerzas alemanas a Inglaterra.
Para los inicios de esta épica batalla aérea, la RAF tenía unos 640 aviones disponibles, que debían enfrentarse a unos 2.600 aviones de la Luftwaffe. En atención a lanzar la Operación “León Marino”, Hitler planificó la invasión a través de todo el Canal de la Mancha, para así remover el único obstáculo que tenía para dominar Europa y dirigirse solo hacia el Frente Oriental, Rusia.
En el primer día de la escalada de esta Batalla Aérea, la RAF, realizó 200 patrullas aéreas, ocupando casi la totalidad de los aviones disponibles.
Los pilotos
La edad promedio de los pilotos de la RAF, era de 20 años, con algunos jóvenes de 18 y otro tanto de más de 30 años, considerando que la mayoría de edad eran 21 años. También hubo componentes de pilotos de varios países que volaron ala con ala con los pilotos de la RAF, hubo aviadores: polacos, checos, neozelandeses, canadienses, belgas, sudafricanos, irlandeses, autralianos, argentinos, estadounidenses y de la Francia Libre, además de otros casos individuales. De los 3.000 pilotos de la RAF, dos tercios tenían grado de oficial, y el otro tercio eran suboficiales de grado de Sargento o similar.
Superados 5 a 1, tanto en máquinas como en personal, los pilotos de la RAF tenían dos ventajas, por un lado el complejo sistema de radar que se había montado, que permitía tener una alerta que avisaba de las incursiones que estaban enviando las fuerzas alemanas y por otro lado era el factor motivacional y era que los pilotos de la RAF, estaban defendiendo su propio territorio. Al despegar y combatir siempre estaban sobre tierra “amiga”, cosa que no era así para los alemanes, quienes una vez sobre el Canal, ya estaban en zona enemiga.
Aviones icónicos de la Batalla
Por parte de la RAF, el Hawker Hurricane fue la espina dorsal de las unidades, si bien era notoriamente inferior en velocidad y ascenso, por contraparte era un avión robusto y maniobrable. Estos aviones armados con 8 ametralladores calibre .303, fueron los responsables de casi el 80% de los derribos durante la batalla. Otro avión icónico de esta batalla, fue el Supermarine Spitfire, mundialmente famoso especialmente por sus elegantes líneas de diseño, combinadas con una gran maniobrabilidad, hicieron de esta máquina el “avión de los sueños”. Por el lado de la Luftwaffe, el Messerschmitt Me-109, fue un avión caza ícono de esta batalla, era un avión de prestaciones similares a los Spitfires entre los 12.000 a 17.000 pies de altura, pero sobre los 20.000 era indudablemente mejor. Esta avión tenía la particularidad de realizar picados muy rápidos y ágiles, lo cual a su vez era una ventaja, sin embargo en contraparte demandaba un gran esfuerzo físico de parte del piloto. Otro avión ícono de estos combates fue el bombardero Heinkel 111, con su cabina acristalada y fuselaje tipo “tiburón”, había tenido una destacada participación en la Guerra Civil Española, sin embargo para la Batalla de Inglaterra, su armamento defensivo se demostró inadecuado para enfrentarse a los cazas más modernos de la RAF.
Otros aviones que tuvieron una importante participación por parte de la RAF, fueron los: Boulton Paul Defiant, Bristol Beaufighter, Bristol Blenheim y el Gloster Gladiator, por contraparte en la Luftwaffe destacaron los: Junkers Ju-87 Stuka, Junkers Ju-88, Messerschmitt Me-110 y el Dornier Do 17.
Epílogo
El costo de la batalla fue alto, de las 3.000 tripulaciones de la RAF que combatieron 544 perdieron la vida, y 814 murieron antes de que terminara la II Guerra Mundial. Este esfuerzo de la RAF quedó plasmado en la famosa frase del Primer Ministro Winston Churchill ante el Parlamento, el 20 de agosto de 1940, «Nunca en el campo del conflicto humano tantos debieron tanto a tan pocos.»
Hoy en día aún hay unos 125 aviadores veteranos de aquellos días, varios de los cuales estuvieron presentes, el viernes 10 de julio en el Palacio de Buckingham, para la conmemoración de los 75 años. En esta ceremonia, se realizó un desfile aéreo y terrestre. En la parte aérea la RAF, desfiló con una formación de 5 aviones clásicos de la Batalla de Inglaterra en formación delta compuesta por 3 Spitfires y 2 Hurricanes, seguidos por un Spitfire formando en línea con un moderno Eurofighter Typhoon, cerrando el desfile aéreo una formación en delta de 3 Eurofighters Typhoon.
